Últimamente casos como el de Sergio Urrego, un joven colombiano que se suicidó por posibles presiones por parte de sus compañeros e institución educativa se han venido presentando, y cada vez desafortunadamente con más fuerza. Aunque se sabe que el bullying o matoneo escolar siempre ha existido, anteriormente las victimas eran silenciosas y simplemente guardaban sus sentimientos y seguían con sus vidas, ya que los padres siempre decían "eso es cosa de niños", pero ahora las presiones pueden ser tan fuertes, que las victimas terminan quitándose la vida al no poder soportar más tanto sufrimiento e humillaciones.
Esta vez voy a compartir el caso de Sergio, un joven de 16 años, inteligente, talentoso, que estaba en grado once en el colegio Gimnasio Castillo Campestre. Hay muchas versiones de cómo sucedieron las cosas, pero todas concuerdan que el principio fue la aparición de una fotografía en donde él y otro compañero se estaban besando. La fotografía estaba en el celular de otra persona y fue descubierta por el profesor de educación física Mauricio Ospina. De inmediato el profesor reportó el hecho a las directivas de la institución.
Según como lo contó la rectora Amanda Castillo en su declaración en la Fiscalia, se llamaron a los padres de familia porque esos actos amorosos dentro de la institución no están permitidos. Lo que agravó más la situación fue que los padres del otro menor demandaron a Sergio por acoso sexual. Todo esto y las presiones de su comunidad educativa hicieron que su familia tomara la decisión de cambiarlo de colegio, pero fue demasiado tarde, el joven se suicidó el 4 de agosto en el Centro Comercial Titan Plaza al noroccidente de Bogotá.
Su madre presentó una tutela que falló a su favor pero está no ordenó ninguna reparación por lo cual ella apeló. En este momento el caso está en investigación en la Fiscalia para determinar si la institución, en compañía de la psicóloga, el profesor y la rectora actuaron de manera que podrían impulsar al joven a quitarse la vida. Lo más probable según una fuente en la Fiscalia que previere guardar su nombre es que se imputen cargos por discriminación agravada, constreñimiento ilegal e inducción o ayuda al suicidio.
Mientras tanto, la madre de Sergio Alba Reyes, sus amigos y demás personas que lo apoyan han organizado marchas de protesta en incluso han logrado llevar el caso a personalidades que apoyan la libertad sexual y repudian el bullying, como Lady Gaga, quien instauró una fundación llamada Born This Way Fundation, que se encarga de hacer campañas antibullying.
Por otro lado, Colombia no es el único país en donde la discriminación homosexual cobra vidas. En Chile, Wladimir Sepúlveda Arce, de 21 años, sufrió en octubre pasado un brutal ataque a golpes que acabó con su vida, o en 2012 cuando Daniel Zamudio murió por una golpiza que le dieron unos jóvenes por ser homosexual. En Argentina, Julio César Cotrina Fasabi fue encontrado sin vida, había sido elegido Miss Gay Tarapoto 2014, y esa al parecer fue la causa de su muerte.
Es importante aclarar, que a los que están en contra de la homosexualidad no se les está pidiendo que acepten la homosexualidad, pero si como sociedad debemos tolerar algunas cosas, así como toleramos que los corruptos nos roben.
En Colombia, estos actos de tolerancia se están viendo, hasta en la comunidad más católica y conservadora. La comunidad San Sebastián es el primer grupo de oración en la Iglesia Católica conformado por gays y lesbianas en el país. Ellos afirman aseguran que sienten el llamado de Dios para trabajar por la comunidad
Cada semana se reúnen a puerta cerrada para elevar plegarias al cielo y socializar experiencias que en muchas ocasiones son lideradas por expertos profesionales.
Los miembros de la comunidad aseguran que su fe es más fuerte que la discriminación de la que a diario son víctima.
Por lo tanto, con actos como estos se puede reducir la discriminación y evitar que personas con buenos sentimientos, aptitudes, talentos, etc se quiten la vida y tengan un espacio de liberación espiritual y de desahogo a las presiones sociales.
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